Señor, tu tienes palabras de vida eterna.

Jn 6,60-69 "Señor, ¿a  donde iremos? tu tienes palabras de vida eterna."

El Evangelio somete a crisis los esquemas exitosos de los seguidores de Jesús. Muchos de los seguidores de Jesús lo abandonan. También nosotros experimentamos nuestras propias crisis de fe. Momentos en los que las palabras de Jesús o sus exigencias nos resultan difíciles de entender y asumir. Jesús entonces nos interpela, con cierto deje de tristeza: «¿También tú me quieres dejar»? La respuesta de Pedro nos puede inspirar: después de todo, a pesar de todo, y haciendo balance de las experiencias vividas, solo nos queda responder a Jesús: «Solo tú tienes palabras de vida eterna».

Señor, a ti venimos, porque solo tú tienes palabras de vida eterna.